Ni la pobreza es una quimera, ni todos los niños vienen al mundo con un pan debajo del brazo. Sin embargo, sin datos ni evidencias es difícil poder hacerse una idea de cuál es el impacto que tiene el problema de la pobreza entre las niñas y niños.
«En Save the Children tenemos las evidencias, día a día conocemos historias de niñas y niños de las que dan buena cuenta los medios de comunicación a modo de ‘tragedia’. Sin embargo, las evidencias también nos muestran que cuando se invierte en los niños, se apuesta por ellos y se centra la intervención en sus necesidades desde la atención integral, muchas de esas ‘crónicas negras’ se vuelven en historias de recuperación y superación. Pero nuestro trabajo y compromiso diario no es suficiente cuando observas los datos. El problema de la pobreza infantil requiere de una respuesta que se escapa de las manos de cualquier ONG, requiere invertir en infancia…»